Esta semana comezaba coa noticia de que o Concello de Vimianzo pretende adquirir a propiedade dos terreos con presenza de xacementos arqueolóxicos, especialmente patrimonio megalítico. Neste municipio hai polo menos seis mámoas catalogadas e postas en valor a través dunha “Ruta dos dolmens“.
Para iso, convocou a máis de medio cento de veciños e veciñas aos que o alcalde, Manuel Antelo, lles explicou que a fórmula para que o Concello sexa titular das parcelas podía ser “a través de compras, permutas ou cesións de uso”. O alcalde, que estaba acompañado polo arqueólogo Fernando Carrera, tamén lles trasladou aos propietarios a posibilidade de informalos sobre os usos que poden facer deses terreos, así como dos permisos que deben solicitar á Dirección Xeral de Patrimonio para realizar talas de arborado ou plantacións, polas especiais características destes espazos de interese histórico e cultural.
Máis de medio cento de veciñas e veciños acoden a charla informativa sobre o patrimonio megalítico
A raíz da súa participación nesa xuntanza municipal, na edición de Carballo do diario La Voz de Galicia publícase hoxe unha entrevista con Fernando Carrera, profesor na Escola de Conservación e Restauración de Bens Culturais de Galicia.
«El principal cáncer del patrimonio es el desconocimiento social que existe»
El profesor coruñés reclama más y mejores iniciativas de divulgación cultural
V. LADO. CEE / LA VOZ 07/03/2017
El arqueólogo Fernando Carrera Ramírez (A Coruña, 1963), una de las principales autoridades sobre todo lo que tiene que ver con megalitismo en el país, dice que Dombate dirigió su vida profesional y por ello siempre muestra una especial sensibilidad hacia el patrimonio de la Costa da Morte. De ahí que considere «muy enriquecedora», la charla que mantuvo el viernes con los propietarios de Vimianzo en cuyos terrenos hay mámoas y otros yacimientos.
-¿Qué le hace más daño al patrimonio, la falta de inversiones de la Administración o el desconocimiento de la gente?
-Todo forma parte de lo mismo. Son dos patas del mismo problema. El principal cáncer del patrimonio es el desconocimiento social que existe y que se debe también a la falta de inversiones para divulgarlo. La pregunta es cómo lo arreglamos. En 30 años de transferencia de las competencias a Galicia no se ha abordado y, en parte, eso obedece a que no existe un requerimiento social.
-¿El Parque do Megalitismo puede ser un buen ejemplo?
-Yo no participé directamente, pero me parece un proyecto magnífico, muy apasionante que creó unas expectativas sociales muy altas. No cristalizó y también era un proyecto muy de la época, megalómano podemos decir, e insostenible para la economía real. Por eso creo que habría que reconducirlo hacia algo que se pueda hacer y se pueda mantener. El patrimonio es rentable y no solo por la riqueza indirecta que genera, sino en sí mismo. No evidentemente desde una perspectiva capitalista de enriquecimiento económico, pero sí desde la óptica de la sostenibilidad y la viabilidad.
-¿Cómo se le explica a un profano que debajo de un campo en el que solo se ven zarzas hay milenios de historia?
-Esto es muy interesante para los técnicos a los que nos gusta el reconocimiento social. Los arqueólogos hemos construido un lenguaje infumable y no hemos sido capaces de transmitir. Por eso me pareció tan enriquecedora la charla del viernes en la que no estábamos hablando con cualquiera, sino con los dueños de los terrenos en los que están los dólmenes. En general sabían que allí había cosas, pero no tenían ni idea de lo que era. A la gente, si se le informa, responde y en este caso tienen un patrimonio magnífico que hay que invitarles a verlo con orgullo, porque es nuestra herencia y el testimonio de sus antecesores. Yo trabajo en restauración y conservación, pero veo que el problema es de comunicación. La dificultad existe, pero es solventable si establecemos las estrategias correctas, con un lenguaje sencillo y claro. Lito [Eiroa, el guía de Dombate] es un ejemplo de esto. La gente sale de allí entendido de que se trata y lo que significaba. Si esto se extendiese, la gente lo defendería mucho más y demandaría inversión para protegerlo y conocerlo.
-En cambio, los bienes se ven muchas veces como problemas.
-Claro, es que no es un problema de dinero. Sí que hace falta algo de inversión, pero en Vimianzo nos decían que ellos quisieran cuidar mejor eso, pero no saben cómo hacerlo, a quién recurrir… Por eso lo que la gente necesita es un lenguaje adecuado, trámites sencillos y tiempos de respuesta adecuados. De ahí que yo insista en que hay que contar con las comunidades de montes, las asociaciones vecinales, culturales… porque hacen un trabajo magnífico y esta es una tarea de toda la sociedad, un objetivo compartido. Y la gente, en general, tiene buena voluntad. Con el trato adecuado, responde.
Fernando Carrera é un dos profesionais citados por Álvaro Arizaga -que tamén imparte clases na Escola de Conservación e Restauración- na charla que impartiu recentemente no Ateneo Santa Cecilia.
O tratamento do Concello de Vimianzo con respecto ao patrimonio arqueolóxico contrasta coa percepción que o Concello de Marín ten do seu propio patrimonio: mentres que a localidade coruñesa está disposta a incorporar ao catálogo de bens municipais unhas construccións milenarias para garantir a súa preservación, entendéndoas como bens públicos, na nosa vila a titularidade de determinados terreos -o monte veciñal, onde se atopan a inmensa maioría dos petroglifos e das mámoas- enténdese como un problema e non parece haber vontade política para propoñer alternativas que, á vista do exemplo de Vimianzo, son viables.
Por riba, o Goberno local de Vimianzo adiántase aos problemas. A diferenza do que ten sucedido en Marín nos últimos meses -talas ilegais no castro da Subidá, agresións aos gravados rupestres do Pornedo e da Carrasca como consecuencia de desbroces realizados sen sinalización previa nin supervisión técnica- o rexedor de Vimianzo toma a iniciativa de informar aos propietarios de terreos susceptibles de estar ‘afectados’ por Patrimonio do que están autorizados a facer nas súas parcelas para evitar danos ou perdas nos xacementos, ao tempo que poden seguir facendo un aproveitamento das súas terras dun xeito compatible cos bens que se localizan neles.
…Así se fan as cousas. Un exemplo a ter en conta. Un espello no que mirarse…
Deixar unha resposta