Experiencia piloto contra caballos salvajes
Los comuneros de Campañó prevén habilitar unas once hectáreas para que pasten los equinos y no causen daños
«O que fixemos foi chegar a un acordo cuns gandeiros, cunha asociación cabalar de aquí, polo que lles cedemos un terreo de once hectáreas e eles comprométense a ter o recinto pechado e cos cabalos dentro», explicó José María Domínguez. El presidente de los comuneros de Campañó subrayó que se trata de una parcela repoblada con anterioridad con pinos que actualmente ya miden entre tres y cuatro metros de altura, por lo que «os cabalos poden andar soltos por aí adiante e non causan problemas». Dejó claro que se trata de un colectivo de ganaderos que tiene los equinos muy controlados con el correspondiente chip, tal y como establece la normativa autonómica vigente”.
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