Descubren un petroglifo en Bora reciclado en un cierre en el monte
“Costa conocía la existencia del petroglifo desde hacía cinco años, pero él mismo confiesa que en aquella ocasión solo se fijó en las dos cruces que se ven más prominentes en la piedra. El puñal, que se encuentra en el extremo inferior de una de estas cruces, lo desveló una visita que hizo recientemente a este entorno del rural pontevedrés. Era de día y se dio cuenta de que sobre la roca se dibujaba «a pequena folla dun coitelo». Por si era una falsa impresión o una ilusión óptica volvió al anochecer y una vez más el puñal sobresalió ante sus ojos. «Volvín a velo con luz indirecta e se apreciou claramente que estaba alí, podía chamar a engano de día, pero de noite non», describe”.
Deixar unha resposta